En el sincretismo netamente brasileño, San Jorge es muy venerado. Llegó del culto Portugués y se introdujo en la vida del Brasil.
La energía de San Jorge es de lucha, un verdadero vencedor y protector. Energía del cambio, del logro, de purificación. Vencer al mal es convertirlo en sabiduría.
En 1980, en Rio de Janeiro, yo tuve la oportunidad de vivir una de las mas maravillosas experiencias de mi vida en contacto con la cultura de mi amado Brasil.
Participé en la iglesia espirita que se ubica en Rua Barao de Ubá, en una serie de ceremonias para canalizar este poder reformador. Mi energía se identificó completamente con la del Santo y fluyo muy abundantemente, presencia completa. El primer día el templo tenía sólo algunos participantes. A partir del segundo día, estaba completamente lleno de gente porque el Santo estaba presente...
Hoy, después del cambio, Brasil es un pueblo próspero, lleno de maravillosos seres llenos de amor y en busca de la espiritualidad.
Dios te bendiga Brasil... eres un país bendito y lindo. Definitivamente que yo tengo un vínculo contigo. Estoy para servirte.
Enrique.
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