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miércoles, 14 de marzo de 2012

Compañera

"Siempre me ha ayudado y después de todo, me deja libre", dije.
Creo que sólo realmente puedes decir que amas a una persona cuando le tienes una completa admiración y respeto por su forma de ser.    
Simplemente, te gusta mucho como ella es.  
Y, cuando la vida te permite estar cerca de esa persona, estás en paz, con la mayor felicidad y plenitud.   
No es una dependencia, sino el bienestar profundo del Ser en compañía, sin conflictos.   
Y, cuando esa compañía se comparte en una oración, en un ritual y las almas se juntan en agradecimiento al Creador por permitir que en ese momento se encuentren juntas, entonces se empieza a entender el porqué Dios nos hizo hombres y mujeres y lo que resulta al estar juntos y junto a El.
No se diga cuando se comparten momentos de intimidad y de gozo y de placer. O en un baile o en un beso.
El amor si existe. Y no es nada malo.  por el contrario, es lo mejor que tenemos.   
   En algún momento la vida terminará y así, nos iremos felices de haber tenido una COMPAÑERA VERDADERA, que nos dió su luz y su felicidad.
Dios te bendiga.
Enrique.
Adivina y aprende.

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